Tengo varios meses queriendo escribir sobre lo que me conecta con mi naturaleza y hoy siendo un fin de semana largo para el descanso, reposo y apreciación de mi puedo compartir algo al respecto.
Hace 6 veranos compartía una magia embelesante con mi sombra y un día desperté con la frase «Somos naturaleza». Pienso que me inspire el en tatuaje de «Soy arte», «El tiempo es arte».
Pero la realidad es que compartíamos información más allá de lo visible. Aquello intangible que nos proporcionaba abrirnos al mundo me permitió abrirme a mi misma.
Este camino ha sido muy largo y doloroso, pero por fin puedo aterrizar-me. Recuerdo que durante 2018 mi crisis existencial me persuadió a buscar alternativas y mis amigas me conectaron con una psicóloga especializa certificada en la metodología de Ana Silvia Serrano una investigadora de la Obsidiana.
Quería llevar un acompañamiento profesional porque durante 4 años había utilizado desmesuradamente el huevo de obsidiana «pirata» y me había arrojado a un abismo de siniestralidad insólito. Por lo cual termine una relación hermosa por seguir a mis monstruos y sobre todo por no lastimarme ¡Gracias Erika del pasado! porque con ello has hecho gemas ¡Si! ¡Lo vas logrando!. Ahora somos amigos íntimos, cercanos, amorosos. ¡Libreees!!!.
En fin.
La piedra de obsidiana tiene una composición química que alterna nuestro cuerpo de una manera que lleva al equilibrio: ¡Así me encontré!.
Tras caminar dentro de laberintos que parecían infinitos y caerme, sobreponerme, deshidratarme, perderme, disuadirme, disociarme, irme y venirme ¡¡¡Estoy aquí!!!. Llegue acompañada:
- Terapia de obsidiana
- Terapia conductual
- Fisioterapia
- Terapia de acupuntura
- Masaje taoísta
- Flores de bach
- Herbolaria
Entre otras alternativas que me han cobijado el corazón y el cerebro.
Solo así, he podía conectar con mi yo atemporal y escuchar todas las versiones de vida que traía: las tradicionales, las rebeldes, las amorfas, las naturales…
¿Qué he escuchado?
Somos naturaleza
Conectar con nuestra naturaleza es un proceso de regeneración compleja en todos los niveles de la existencia; nuestro cuerpo físico, emocional, psicológico, energético, espiritual.
Para tener la lucidez de la existencia en congruencia con nuestra naturaleza es necesario navegar por los mares más profundos de nuestro interior y atreverse a bucear para encontrar los arrecifes de recuerdos que nos cobijan nuestras carcasas de creencias que van trazando nuestros pasos en la orilla de la playa relacional.
Esta metodología te lleva a los rincones más oscuros de ti a partir de la meditación y de la apertura de tu inconsciente. De pronto tu vida se siente a otro ritmo, más tranquila, se percibe a detalle la cotidianidad.
Para mi el autoconocimiento es la pista número uno para entrar al laberinto y se puede llegar de diferentes formas:
- Autoobservación
- Diagramas lunares
- Escritura
- Terapias alternativas
- Acompañamiento de una red de afecto
- Circulos o grupos de ayuda mutua
Para mi estas han sido básicas para la sobrevienta catártica.